jun 26, 2014 // Álvaro Serrano // 0 // 73 Views

Aún se desconoce si el seleccionador de La Roja continuará después de la eliminación del Mundial.

La tormenta de la eliminación de la selección española en primera ronda del Mundial continúa teniendo secuelas en forma de dudas y debates en torno al futuro del grupo que  tanto consiguió hace unos años. Cada día que pasa, es más evidente que el ciclo de muchos jugadores en el combinado español ha terminado. Algunos, como Xavi y Villa, parecen lejos de volver a vestir La Roja y también se cuestiona la continuidad de otros como Casillas, Torres o Xabi Alonso. Lo que nunca parecía que iba a ser materia de debate es la continuidad de Del Bosque, algo que en las últimas horas ha cobrado mucho más relevancia al ver como los seleccionadores de las recién eliminadas Italia (Prandelli) y Costa de Marfil (Lamouchi) presentaran su dimisión al caer en primera ronda.

El míster aún tiene crédito

Parece que tanto la federación como la mayor parte de la afición siguen dando a Del Bosque la confianza que un entrenador que ha ganado un Mundial y una Eurocopa se merece. La gran culpa del fracaso de esta Copa del Mundo se achaca a la falta de compromiso de un grupo de jugadores que se ha quedado sin hambre de títulos después de haber ganado todo. En este sentido, Del Bosque debió ver esa desgana y debió promover una renovación en su lista de convocados.¿Es necesaria también una renovación del banquillo?  ¿Debe dimitir Del Bosque como han hecho Prandelli y Lamouchi? Sus errores, aunque letales en esta competición, parecen ser reparables en un futuro y, aunque muchos digan que lo valiente y digno sería dimitir, también es valentía intentar levantarse después de una caída como esta. La decisión de su continuidad, que debe ser anunciada en los próximos días, recae sobre el técnico y su entorno. El futuro de la selección se acoge a la reflexiva paciencia que tiene como virtud el (todavía) seleccionador.