El cuarteto de Sheffield recoge un estilo más directo y potente en su quinto trabajo.

Los niños prodigio del indie han vuelto. Tras su eclosión con los primeros álbumes, Whatever People Say I Am (2006) y Favourite Worst Nightmare (2007), Alex Turner y compañía sorprendieron algo más tarde con un dubitativo nuevo estilo en su siguiente Lp, Humbug (2009), que parecía que tomaba forma en un perfeccionista Suck It And See (2011). Pues bien, de nuevo muestran su facilidad para componer en su recién estrenado AM (2013), en el que los Arctic Monkeys parecen haber dado un paso más en esa minuciosa madurez que encontraron, albergando un sonido más duro, inmediato y nocturno que en el pasado.

Desde hace algo más de un año destaparon, R U Mine?, el primer single de este AM: Descarada, potente, rockera y con unas excelentes pistas de guitarra y batería.

R U Mine – Arctic Monkeys

Tiempo después, dispararon Do I Wanna Know?, tema que esconde una extraña declaración de amor envuelta en un rocoso riff de guitarra, que muestra que los Arctic Monkeys se han vuelto unos tipos duros:

Do I Wanna Know? – Arctic Monkeys

Algo similar ocurre con la enérgica I Want It All y su repetitivo y sólido riff de eléctrica. Y es que no es mera casualidad esta cercanía musical al stone rock americano, ya que Josh Homme (líder de QOTSA) ha contribuido en algunos temas como One For The Road y Knee Socks. Ambas también presentan fuertes influencias del hip hop, al igual que ocurre con Arabella y la famosa Why’d You Only Call Me When You’re High?, en la que Turner relata sus pesimistas pensamientos amorosos en una noche de fiesta y excesos.

Why’d You Only Call Me When You’re High – Arctic Monkeys

En Snap Out of It adoptan un aire bailable que acompaña a olvidar los problemas. Por su parte, Turner y compañía introducen ciertos rasgos sesenteros en la tenebrosa Fireside (que ha creado cierto revuelo en las redes por su parecido inicial con Eres de Supersubmarina). Pero, sin lugar a dudas, donde los Monkeys vuelven a cautivar es en sus baladas. En I Wanna Be Yours, Turner versiona el conquistador poema de Jonh Cooper, artista punk de los 70 que siempre ha sido fuente de inspiración para Alex. Mientras tanto, Mad Sounds tiene cierto parecido musicalmente a la mítica Pale Blue Eyes de The Velvet Underground. Finalmente, escuchando No1 Party Anthem vienen a la cabeza otras baladas del grupo como Cornerstone, pues de nuevo Alex Turner vuelve a revelar su prodigioso talento cuando tiene una acústica en las manos:

No1 Party Anthem – Arctic Monkeys

A pesar de que para muchos este nuevo rock de AM no es tan bueno como el de los inicios de la banda, estos monos árticos han vuelto con muchísima fuerza. Poco les falta para llegar a la cima de los más grandes del rock.